Aspectos que deberemos tener en cuenta:
El primer paso es tener el terreno.
Antes de empezar con la construcción necesitaremos saber si es urbano, urbanizable o rústico, deberemos confirmar que sea terreno urbano.
Normalmente el precio de la parcela suele ser proporcional a los m2 posibles a edificar en la misma. Es más, los terrenos se valoran en base al potencial de edificabilidad que tienen asignada en la normativa urbanística.
Es importante destacar la enorme subida del precio de los materiales, lo que preña más de incertidumbre el poder establecer una cifra aproximada.
Una vez tenemos la parcela y el presupuesto de ejecución de material aproximado, podremos encargar a los arquitectos el proyecto de ejecución a presupuestar por las constructoras. Este variará en base a las calidades, condicionantes técnicos, método constructivo, etc.
Lo recomendable es contar con un extra del 5% del presupuesto
El precio depende de su prestigio y del proyecto en sí.
El coste de contratación suele moverse del 5 al 10% del presupuesto de ejecución material. A este coste hay que añadirle el IVA que, al ser tratado como consultoría es del 21%.
Además, hay que contratar un aparejador que lleve el control de la ejecución de la obra, así como un coordinador de seguridad y salud que garantice que se cumplen las medidas pertinentes para evitar accidentes.
La Licencia urbanística
En el momento que se solicite (o bien se conceda, depende del ayuntamiento) la licencia para construcción de la vivienda, se pagan las tasas y el Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras.
Otras tasas y gastos
Al finalizar la obra, se debe abonar la licencia de primera ocupación al ayuntamiento, que estará entre el 0,5% y el 1% del presupuesto de ejecución material final de la obra. Por último, debemos añadir el alta de los suministros de agua, luz, telecomunicaciones y gas (si lo hubiera) y solicitar la cédula de habitabilidad. Todo esto suele rondar los 1.000 euros.
Fuente: /www.idealista.com/news/
Hecho con por Witei - CRM